Advertencia previa: este artículo no tiene que ver con la NFL, sino con cómo se debe escribir. Si no os interesa la ortografía, no sigáis leyendo.
Ambientemos este artículo con una canción que se titula Yea, yea (ye, ye; es decir, y y).
Los cambios de normas suelen generar polémica. Pasa con la NFL, pasa con la RAE. ¡La madre que me parió, cuánto indignado! Y esto no es un off topic (comentario ajeno a la temática del blog), sino que, en la medida en que esta mierda está escrita en español, procede comentar, siquiera brevemente, la reforma ortográfica aprobada por la Academia.
Lo primero que debo decir es que me parece acojonante la cantidad de comentarios indignados que he podido leer estos días por el Interné. Y sospecho que la mayoría de esos indignados desconocen que la mayor parte de la reforma actual consiste en no aceptar formas que antes estaban aceptadas, aunque no eran las recomendadas (sí, antes de la reforma, la escritura normal de guion ya era guion).
Quienes lean este blog ya lo sabrán, porque lo comenté en el pasado: el adverbio solo y los pronombres demostrativos (este, ese, aquel y sus diferentes formas) solo debían llevar tilde cuando su morfología resultase dudosa. Cito lo que comentaba en julio: "¿sabíais que solo sólo debe llevar tilde si es adverbio --de significado equivalente a solamente-- y resulta ambiguo si se trata del adverbio o del adjetivo? en otras palabras, que si le ponéis tilde y no es ambiguo, estáis cometiendo una falta de ortografía; lo mismo, mutatis mutandis, para el uso de la tilde en los demostrativos, solo pueden llevar tilde cuando sean pronombres y existan dudas sobre si son adjetivos, aunque en este caso casi nunca existe ambigüedad, por lo que si no ponéis la tilde nunca, probablemente siempre acertaréis".
Vamos, que si no había duda, ponerle tilde a solo o a este, era una falta de ortografía ANTES YA DE LA REFORMA (y encontrar un caso dudoso con demostrativos era prácticamente imposible, probad). Estos días hordas de indignados vomitan mierda indignada, expresando su indignación por la tropelía consistente en prohibir la tilde en el adverbio solo y en los pronombres demostrativos, indignante concesión de los académicos a los ignorantes que no saben poner tildes. Vamos, que nos indignamos porque la reforma solo intenta facilitar la vida a la turba ignorante que no sabe que sólo y éste deben llevar tilde cuando son adverbio y pronombre, respectivamente. ¿Cuántos de los indignados que se rasgaban las vestiduras contra la RAE conocían que cada vez que escribían *éste estaban vulnerando una norma ortográfica? Estoy seguro de que muy pocos.
Pero, ah, amigos, he aquí otra sorpresa: todo lo que conocemos de la reforma ortográfica procede de artículos escritos por periodistas. Tan fiable como Brett Favre anunciando su retirada. Y la falta de fiabilidad de estos artículos periodísticos ya se ha puesto de manifiesto a las primeras de cambio: la RAE no ha modificado el régimen de acentuación gráfica del adverbio solo tal y como se nos decía el viernes. No se prohíben esas tildes, sino que, según leo en la fe de errores de este artículo de elpais.com, "la RAE recomienda no poner tilde a 'solo', pero no considera falta ponérsela cuando es adverbio".
¿Alguien se ha parado a pensar que solo y este son palabras llanas terminadas en vocal y que, por ello, no deben llevar tilde? ¿Tan descabellada resultaría la reforma? Solo (sin tilde) existe tilde diacrítica en monosílabos. Pues ya está. Supongo que igual de indignados estarían los informados críticos cuando se decidió que el sustantivo fe no debía llevar tilde (ni mayúscula inicial). También estoy seguro de que muchos de esos indignados creen que se puede escribir ti con tilde.
Sobre la ausencia de tilde en guion, tres cuartos de lo mismo. Antes de la reforma, esa era la escritura correcta. Lo que pasa es que se permitía escribir *guión a las personas que lo pronunciasen como un hiato. Hoy no. Pues bueno. Me parece bien. Así es como lo pronuncian la mayoría de los hispanohablantes, y no siempre van a tener que "plegarse" a lo que se diga (nunca mejor dicho) en Castilla. Mirad lo que decía el Diccionario panhispánico de dudas, publicación oficial de la RAE del año 2005 y que tiene valor normativo (en otras palabras, contiene reglas "oficiales"): "la doble grafía, con o sin tilde, responde a las dos formas posibles de articular esta palabra: con diptongo (guion [gión]), caso en que es monosílaba y debe escribirse sin tilde; o con hiato (guión [gi - ón]), caso en que es bisílaba y se tilda por ser aguda acabada en -n. La articulación con diptongo es la normal en amplias zonas de Hispanoamérica, especialmente en México y en el área centroamericana; por el contrario, en otros países americanos, como la Argentina, el Ecuador, Colombia y Venezuela, al igual que en España, esta palabra se articula con hiato y resulta, pues, bisílaba. Debido a esta doble articulación, y con el objetivo de preservar la unidad ortográfica, en la última edición de la Ortografía académica (1999) se establece que toda combinación de vocal cerrada átona y abierta tónica se considere diptongo a efectos de acentuación gráfica. Por ello, en guion y otras palabras en la misma situación, como ion, muon, pion, prion, Ruan, Sion y truhan, se da preferencia a la grafía sin tilde, aunque se permite que aquellos hablantes que pronuncien estas voces en dos sílabas puedan seguir tildándolas".
La modificación consistente en que la conjunción o deje de llevar tilde cuando separa cifras es algo que algunos ya veníamos reclamando, porque no tenía sentido alguno. Copio, de nuevo, lo que decía allá por septiembre en un artículo titulado Enfrentamiento bloguero: 16 o 18, en el que tuve la suerte de contar con la colaboración del colega bloguero Jordi, de Illegal Return: "no pongo tilde en la o que separa ambas cifras porque aunque la RAE sigue recomendando su uso para evitar confusiones con el número 0, me parece del todo innecesario. Si alguien se confunde debe graduarse la vista. Esto es lo que dice el Panhispánico de dudas: Por razones de claridad, ha sido hasta ahora tradición ortográfica escribir la o con tilde cuando iba colocada entre números, para distinguirla del cero: 3 ó 4, 10 ó 12. La escritura mecanográfica hace cada vez menos necesaria esta norma, pues la letra o y el cero son tipográficamente muy diferentes. No obstante, se recomienda seguir tildando la o en estos casos para evitar toda posible confusión".
El tema de la ye me parece una mera anécdota, aunque tiene una justificación fónica, dado que es así como se pronuncia casi siempre (como "ye") y no como "i" (salvo, precisamente, en el caso de la conjunción y, se me ocurren pocos ejemplos en los que esa letra se corresponda con el fonema [i]). Eso sí, sin escuchar las razones, no tardan en manifestarse los indgnados. Indígnense, caray (uy, si acabo de poner dos ejemplos de pronunciación no yeísta).
Por último, el tema de Catar en vez de Qatar. Este he de admitir que me duele un poquito, ya que por mi profesión tengo que escribir con cierta frecuencia la palabra quorum. Joder, cuórum... Creo que me quedaré con el extranjerismo crudo (quorum, tal cual del latín y sin tilde). El motivo de este cambio es que "en nuestro sistema de escritura, la letra q solo representa al fonema /k/ en la combinación qu ante e o i (queso, quiso). Por ello, la escritura con q de algunas palabras (Iraq, Qatar, quórum) representa una incongruencia con las reglas". A mí me parece una razón de peso, la verdad. En el fondo, Qatar es una transliteración del árabe دولة قطر, por lo que lo normal es adaptarlo al español conforme a las reglas ortográficas generales. No veo por qué tenemos que escribirlo como los anglosajones.
Ya he terminado. Y ahora que ya sabéis qué habría cambiado y qué no, os podéis seguir indignando si queréis. Eso sí, esperad a que se publique dentro de unos días la nueva Ortografía para ver si los cambios se han producido en los términos que señala la prensa.
Solo quedan unos minutos para que comience la jornada, que disfrutéis de esta.
domingo, 7 de noviembre de 2010
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Al fin alguien con cerebro y capacidad de reflexión.
ResponderEliminarGracias.
La verdad es que conforme leía las críticas pensaba lo mismo. La moda del día era cagarse en los fascistas de la RAE.
ResponderEliminar¡Felicidades! Un texto muy bien escrito. Y no solo eso, coincide (casi) plenamente con mi opinión sobre la reforma, que era necesaria, por mucho que le pese a algunos. De hecho, creo que se han quedado cortos.
ResponderEliminarNo me esperaba este tema en este tipo de blog, y menos tan bien redactado y con tanta lógica. Supongo que mis prejuicios me lo impedían.
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarNo puedo compartir tu visión por el simple hecho de que no estoy a favor de la unificación de las variedades del castellano, pero dejando de lado ese detalle, enhorabuena por un artículo bien escrito y una buena defensa de tu posición. La verdad es que, al margen de lo que yo opine acerca del tema, empiezo a estar harta de tanta crítica por el placer de criticar y resulta revitalizador leer una opinión razonada...
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