miércoles, 2 de noviembre de 2011

¿Nadie es imprescindible?

Antes de entrar al tema del que vengo a hablar, unas líneas para reflexionar sobre cuestiones relativas a este blog. Es que le he estado dando vueltas a esto últimamente. El caso es que el blog se está convirtiendo en (casi) únicamente una entrega semanal del Plácido domingo, jodido lunes, y no sé si termina de gustarme la idea. El 90% de lo que escribo es para esos fines. Además, hay otro tema relacionado con el anterior: que para preparar cada edición del Plácido domingo me tiro una burrada de horas. Y claro, acabo tan cansado de escribir ese artículo que durante el resto de la semana apenas me quedan ganas para publicar nada más. La preparación de ese artículo semanal está entrando peligrosamente en el terreno de la obligación. No me gusta nada. Aquí escribo por pura diversión. Si no, lo dejo. Esa es la idea. Si paso de la diversión a la obligación, mejor paro. Por eso, es probable que el próximo Plácido domingo, jodido lunes vea reducida su extensión significativamente. También aprovecho para recordar que no en todas las jornadas prepararé el dichoso artículo, porque la NFL es uno de mis vicios, no un negocio. Por eso, si en alguna jornada tengo un vicio alternativo que me apetezca más, al Plácido domingo le darán por saco. Por ejemplo, el próximo domingo 13, mi prioridad será el Dépor-Celta. Eso no implica necesariamente falta de Plácido domingo (el derbi comienza a las 8 y termina poco antes de las 10). Y el primer fin de semana de diciembre espero irme de puente, con lo que poca NFL veré. Que tampoco pasa nada, porque por suerte hay muchas −cada vez más− y mejores maneras para informarse de lo que sucede cada fin de semana en los emparrillados estadounidenses. No es imprescindible.

Bueno, tras esta introducción tan egocentrada, un poco de música y al lío. ¿Conocéis a los Nomads? Deberíais. Esto es Can't keep my mind off you. Justo lo que le pasa al equipo del que vamos a hablar con el jugador del que vamos a hablar.



Vamos a hablar de la imprescindibilidad. Y quién mejor para introducir el tema que Jorge Garbajosa. Un tipo al que, antes de que dijese la frase que voy a citar, le tenía bastante simpatía. Pero que en cuanto la soltó, entró en el amplio grupo de gente que considero (seré suave) prescindible. Supongo que todos lo conocéis. Garbajosa fue un excelente jugador de baloncesto. Brillante. Y, en la pista, muy inteligente. Pero un desgraciado día, en la cancha de los Celtics, Garbajosa se lesionó de gravedad. Y a partir de ahí se convirtió en un jugador mediocre. Mediocre siendo generosos.

Esa lesión hizo que Garbajosa se tirase sin jugar muchos meses. Tantos, que su participación en el Eurobasket  de 2007 peligraba seriamente. La conveniencia de su convocatoria era más que dudosa, ya que no había disputado ni un solo partido entre el día de su lesión y el torneo. Sin embargo, Pepu Hernández lo convocó. Supongo que todos recordaréis el machacón eslogan que repetía durante aquel Eurobasket Andrés Montes: cómo se lo han currado los de la Mutua. Se refería al seguro que permitía que Garbajosa estuviese en ese torneo. Su rendimiento no fue bueno. No era ni la sombra del jugador del Mundobasket de Japón. Nunca volvió a serlo. Pero el caso es que el seleccionador, a pesar de los pesares, contó con él.

Unos meses después, poco antes de los Juegos Olímpicos de Pekín, en uno de los episodios más turbios de la historia reciente del baloncesto español, el presidente de la Federación decidió despedir a Pepu Hernández sobre la base de pretextos infames. Se decía que Pepu tenía un acuerdo con un club ACB (falso, como luego se probó; irónicamente, el que le sustituyó como seleccionador sí lo tenía) y que su dedicación no era plena. Lamentables excusas para ocultar la única verdad: que al presidente de la Federación le caía mal y decidió echarle. Punto. No hay más. Habrá quien crea acertada la decisión y quien crea que era un error, pero el único y exclusivo motivo del despido era ese: que al jefe le caía mal.

Nada más confirmarse la noticia, se pidió opinión a los jugadores. Ahí Garbajosa dio una muestra de su calidad humana, de la pasta que está hecho este tipo:

"Nadie es imprescindible".

Garbajosa se había pasado de nuevo el año lesionado, y su participación en los Juegos Olímpicos era más que dudosa. Personalmente, creo que esas declaraciones disiparon todas las dudas. Para ese torneo y hasta el fin de los tiempos. Un fijo hasta que dijo que se retiraba hace unos meses (menos mal), cuando recibió el correspondiente homenaje de la FEB. Tras abandonar la NBA, la sombra del antiguo Garbajosa firmó un par de contratos suculentos que fueron resueltos de forma anticipada por los clubes que le pagaban tan generosamente. La paciencia tiene un límite, claro. Y nadie es imprescindible.

¿Nadie es imprescindible?

Una de las conclusiones más claras de lo que llevamos de temporada es que en la NFL sí existe un tipo imprescindible. Más que ninguno. Ese es Peyton Manning. Con él, los Indianapolis Colts aspiran al anillo. Sin él, aspiran al número 1 del draft. O uno de los mejores equipos de la NFL (con) o uno de los peores (sin).

Aunque la debacle ante la ausencia de Manning era bastante previsible, no lo era hasta el punto que estamos observando. Estos Indianapolis Colts, con sustancialmente la misma plantilla que la actual (pero con Manning), completaron una temporada casi perfecta hace tan solo dos años. Con Manning, esa temporada, solamente cayeron en un partido (perdieron tres, pero sin Manning en faena). En el más importante, eso sí, en la Super Bowl contra los Saints, Indianápolis palmó.

Algunos analistas bromean (o no) sobre la posibilidad de otorgar el MVP de la presente temporada a Peyton Manning. La diferencia entre su presencia o ausencia en la franquicia es abismal. Manning, por sí solo, aportaría unas 11 o 12 victorias. Ahí es nada.

Se compara lo que está sucediendo ahora con los Colts con lo que les pasó a los Patriots en la temporada 2008-2009. Entonces, en el primer partido de la temporada regular, Tom Brady se lesionó gravemente y se perdió toda la temporada. A pesar de la ausencia del quarterback estrella, los Patriots terminaron con un muy buen balance de 11-5 (que, sin embargo, no les valió para clasificarse para los playoffs, porque en los partidos más importantes no dieron la talla). También se alude, aunque menos, al partido que jugaron los Packers el año pasado sin Aaron Rodgers en Foxborough ante unos Patriots que se paseaban por la NFL apalizando al personal. En ese partido, los Packers se quedaron a las puertas del triunfo. Pese a la baja de Rodgers, Green Bay compitió con el entonces mejor equipo de la NFL.

Supuesta conclusión: Peyton Manning es imprescindible. Más que nadie. Porque con él los Colts serían aspirantes al anillo.

¿Seguro? Yo no lo estoy tanto. Ah, la incomparabilidad de la información. Que no, que no son sucesos comparables. La anterior conclusión se basa en ciertas afirmaciones cuya certeza es más que cuestionable. A pocos nos cabían dudas de que los Colts sin Manning serían una mierda (aunque no hasta este punto). Pero, ¿seguro que con Manning serían aspirantes? Pues no. Eso no lo sabemos. La temporada pasada los Colts ya dieron algunas señales de alarma. Es cierto que una epidemia de lesiones se cebó con ellos, pero caminaron en el alambre durante buena parte de la temporada regular. Recordemos que los Jacksonville Jaguars, (¡los Jacksonville Jaguars!) visitaron el Lucas Oil Stadium a falta de dos jornadas para la conclusión de la temporada en un partido que, si ganaban, les daba la división. Si los Jaguars hubiesen vencido en ese partido, los Colts habrían dejado de ganar una de las divisiones más flojas de la NFL.

No sabemos qué habrían hecho estos Colts con Manning. Eso es deporte-ficción. Pero lo que tengo claro es que algunos de sus males no son directamente imputables a la ausencia de Manning. ¿Peyton Manning defendía? Es que no lo recuerdo bien. Me parece que no. Es que los Colts son el segundo equipo que más yardas por partido concede y el que más puntos por partido recibe. ¿Con Manning habría sido diferente? No lo sabemos, pero esa defensa ya venía dando señales preocupantes. Y digo que no lo sabemos porque los rivales no atacarían igual si la "amenaza Manning" estuviese acechando en la banda. Peyton Manning, en cierto modo, condicionaba el ataque rival: había que mantener a Manning fuera del partido, por lo que había que estirar la posesión del balón al máximo. Así que sí, algo influye, pero no tanto.

Hace un par de semanas los Colts recibieron 62 puntos. Lo más vergonzoso del asunto es que con 41 a 7 en el marcador, los Saints sentaron a Brees y a otros titulares. No realizaron un solo intento de pase más en el resto del partido. E Indianápolis recibió un touchdown en un drive que consistió en seis carreras consecutivas. Vergonzoso. A pesar de que la defensa de los Colts sabía que los Saints iban a correr, fue incapaz de pararlos.

La semana pasada ocurrió esto:


¿Con Manning en el campo (en la banda) habría sido diferente? Pues eso.

Lo que sin duda revelan los resultados de los Colts durante el presente año es el fracaso de Bill Polian y Jim Caldwell. Y, en cierta medida, también de Peyton Manning. Polian es el general manager de la franquicia. El máximo responsable de la gestión del equipo. La situación actual revela una falta de previsión imperdonable. La plantilla confeccionada por Polian es un desastre. Es cierto que es complicado atraer a un quarterback suplente de garantías con Manning en tu plantilla, porque la condena al ostracismo estaba casi asegurada (hasta esta temporada Manning no se había perdido ni un solo partido por lesión), pero el plan B era necesario. No supieron encontrar su Matt Cassel. El siguiente culpable, Caldwell, el head coach. Desde que llegó, se sospecha de su incompetencia. Incompetencia entendida como ausencia de competencias, de funciones. Siempre había parecido que Peyton Manning era el que mandaba en ese equipo. Caldwell aparentaba ser una marioneta. Sea así o no, el desastre de la temporada es también directamente imputable a él. Estos Colts son un equipo sin alma. Da pena verlos. Y van a peor. Porque antes por lo menos plantaban cara (Kansas City, Pittsburgh y Tampa Bay sufrieron lo suyo para ganar a los Colts), pero ahora se dejan llevar. Algo que no puede permitir un entrenador.

El último fracasado es el propio Peyton Manning. Porque él, coordinador ofensivo de facto de los Colts, ha sido incapaz de enseñar absolutamente nada a sus compañeros. No saben vivir sin él. Que desde un punto de vista personal es cojonudo para Manning, pero como "jugador de equipo" resulta bastante reprochable. Regala un pescado a un hombre y le darás alimento para un día, enséñale a pescar y lo alimentarás para el resto de su vida. ¿Qué ha enseñado Manning a sus compañeros? Es evidente que de donde no hay no se puede sacar, y no se puede imputar a Manning la ineptitud de Curtis Painter. Eso es culpa de quien lo seleccionó, fundamentalmente. Pero más que enseñar a pescar parece que Manning ha creado una situación de dependencia funesta para los Colts.

¿Nadie es imprescindible? Relativamente.

El futuro de la franquicia es complicado. Depende de dos factores: de si terminan en el último lugar de la NFL y de si Peyton Manning se recupera para la práctica del football. Si los Colts son últimos, tendrán oportunidad de seleccionar a Andrew Luck en el próximo draft. Luck es la mayor promesa de este deporte desde el propio Peyton Manning. El sábado pasado, su universidad, Stanford, jugó contra el equipo de Los Ángeles, USC (una de las claves que explican que no haya franquicias de NFL en Los Ángeles, son de USC, con este equipo tienen saciada su sed de football). Era uno de los mayores retos de Andrew Luck esta temporada, e hizo esto (ahí tenéis TODAS sus jugadas, para que juzguéis vosotros mismos).



La locura por Luck no entiende de límites. A pesar de la inmensa cagada que cometió al final del 4.º cuarto con el partido empatado (lanza una intercepción retornada para touchdown), los analistas se deshacen en elogios por saber reponerse de esa cagada. En el siguiente drive Stanford empata el partido. Claro que en ese ataque resulta decisiva una discutible pass interference señalada contra USC en tercer down. Stanford gana el partido tras tres prórrogas (las reglas NCAA son distintas de las de NFL, ahí el que recibe la anotación en el primer drive de la prórroga puede responder, y puede haber varias prórrogas), con Luck como héroe.

Si pueden, ¿elegirán los Colts a Luck? Todo indica que sí, pero eso dependerá de lo que suceda con Manning. Si se recupera Peyton (algo que no es seguro), tendrán que elegir entre uno u otro. No parecen compatibles. Nadie considera que hagan un Rodgers-Favre. Luck está para jugar ya. Y Peyton se tomaría como un agravio la elección de Andrew. Las alternativas son las siguientes, en ese escenario (en el de un Manning "sano" en marzo y unos Colts con la primera elección del draft):

1.- Traspaso de Manning a otro equipo y elección de Luck. Escenario más probable. Se quedarían con el QB de fiabilidad dudosa (en NFL) y se desharían del QB fiable, pero con una vida útil corta y de salud frágil. Por Manning recibirían un carro de elecciones del draft. Recordemos que por Carson Palmer (¡Carson Palmer! no me jodas...) se dio una primera ronda de 2012 y una segunda o primera de 2013 (será primera si los Raiders llegan a la final de conferencia de la AFC esta temporada o la que viene). Es decir, que tendrían a Luck, el (supuesto) mayor talento joven de los últimos años y multitud de elecciones para reclutar aún más talento joven.

2.- Traspaso de los derechos por el número 1 del draft a otro equipo. Los Colts recibirían una "millonada" (imaginaria) en elecciones de primera y otras rondas. Se quedarían con el QB fiable y podrían incorporar talento joven a su alrededor. Eso sí, deberían abordar la cuestión del suplente de Manning.

3.- Convivencia de ambos. Muy improbable. El coste de oportunidad sería muy alto.

Conclusión: que si hay alguien imprescindible en la NFL, ese parece ser Peyton Manning. Pero los Colts (probablemente) prescindirán de él en marzo si llega la ocasión. Aunque claro, ese Peyton Manning no es aquel Peyton Manning. Qué lío.

6 comentarios:

  1. La diferencia entre los Patriots de Cassel y los Colts de Painteer es que los primeros tenían un señor entrenador, una defensa más que aceptable y un QB reserva que había mamado durante tres años el sistema de ataque de New England.

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  2. A mi me da igual qué hagas con tal de que te diviertas y escribas algo de vez en cuando, no hagas algo que no te apetezca para no rallarte y no nos cierres el blog, que es un soplo de aire fresco que da gusto leer.
    Yo creo que si eligen Colts, se quedan con los dos, y manning le dará unas clases a Luck sobre cómo ser coordinador ofensivo desde la posicion de QB, sería la releche. en teoria tienen una buena linia ofensiva para el futuro para proteger al nuevo jugador franquicia. En miami lo bueno seria que relanzaria un franquicia que lelva unos años dando tumbos.
    He leido que arizona y st louis tmb estan en la carrera, pero creo que han apostado demasiado a sus qb titulares actuales (joder, bradford es jugador de segundo año (y le pagan una millonada), y arizona ha dado el oro y el moro por Kolb)

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  3. Según leo parece una locura no elegir a Luck de nº 1 sea cual sea el equipo que tenga la opción. En los Rams también se habla de quitarse a Bradford en caso de poder elegir a Luck. El principal asunto para poder analizar todo esto es la recuperación de Manning. Creo que hasta que no vuelva a jugar, si es que vuelve, no se va a saber su nivel. No creo que los Colts se planteen la segunda opción que manejas vista la experiencia actual.
    Una opción que he leído en varios sitios es la posibilidad de que Luck fuerce un traspaso si el equipo que lo elige no es de su agrado, como en su día hizo Eli.

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  4. Tienes mi completo apoyo respecto a lo del primer párrafo. Yo intento hacer un resumen (mucho más modesto) de la jornada de vez en cuando, y ya me cuesta un huevo. Y claro, luego veo tu faraónico PDJL y lo flipo. Así que si alguna semana nos lo perdemos, se entendería (aunque me jodería un huevo).

    Respecto al tema de la entrada, puff, es que da para escribir un libro. Yo estoy empezando a sospechar que los Colts mantienen a Caldwell porque casi les garantiza el "Luck award". Es que el domingo contra los Titans fue de risa, las cagadas de los Colts eran inexplicables, ya no solo el diseño de las jugadas, luego están las faltas tontas, offsides, salidas en falso... y luego el punt bloqueado, menudo circo. Y es que no me jodas, esas cosas son de equipo mal entrenado, que ni siquiera saben hacer un puto snap como dios manda. Ojo que no acabe la temporada, los Colts consigan la primera elección del draft y sólo entonces echen a Caldwell a la calle.

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  5. Hombre, serán muchas horas, pero hay algunos párrafos de PDJL, de esos que destilas veneno e ironía en cada palabra que yo te imagino relamiéndote los colmillos del gusto.
    Aunque sea siempre puedes hacer lo peor, lo mejor y lo regular en vez de la panzada de partido a partido.
    Ala, un abrazo y que sigas mucho tiempo...

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  6. 555, eres un crack, tus PDJL son cojonudos, por favor no cierres el blog, escribe cuando puedas o cuando quieras, entiendo que si uno no disfruta escribiendo no es lo mismo, y es más, no transmites tanto. Si tienes que hacer las crónicas más cortas, o una semana no escribes nada no nos importa. Según leo los comentarios hay más fans de tu blog que piensan lo mismo.
    Y eso que quien te escribe pertenece al lado oscuro, es un gran fan del equipo-que-no-debe-ser-nombrado.
    Un abrazo

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