martes, 20 de diciembre de 2011

Plácido domingo, jodido lunes: jornada 15

Uno de los principales atractivos de la NFL es su impredecibilidad. La paridad es una constante, y los campeones que repiten son excepción. Nunca ganan los mismos. Y eso es una virtud, porque hace el deporte más emocionante, más interesante. Pero nadie esperaba que las sorpresas llegasen a las cotas de esta semana. Vamos con ello que hay mucho que comentar.



Música. No soy nada de los Smiths. Creo que están hipersobrevalorados, pero queda muy de guay decir que te molan. De lo esencial para todo alternapijo. Muy cacas. Pero como homenaje a los Smiths de los San Francisco 49ers, que hicieron un partidazo este lunes, que suene The boy with the thorn in his side.



Lo más comentado

No todos los días son fiesta. Era el partido del siglo. Qué digo del siglo, del milenio. Ningún partido había despertado tanta expectación esta temporada, tanto aquí como en Estados Unidos. Por aquí, hasta el Marca le dedicaba una página en su edición impresa, que luego estaba entre las noticias más leídas en su versión digital. También la prensa española de información general hablaba de Tebow. El ABC comentaba sus supuestos milagros. Un seguimiento sin precedentes en España, debido sin duda a los méritos deportivos de Tebow.

En Estados Unidos, el revuelo no ha sido menor. El mítico Saturday Night Live dedicaba un sketch al pospartido de la pasada jornada entre Broncos y Bears. Descojonante:


Y no veáis el lío que se montó entre NBC y CBS para emitir el partido entre Broncos y Patriots. El partido estaba inicialmente programado en la CBS. Pero la NBC, que emite el Sunday Night, tiene derecho en las últimas jornadas a cambiar el partido elegido inicialmente si este no tiene interés. Esta jornada, la NBC tenía programado el Chargers-Ravens. La NBC puede sustituir su partido por cualquier otro menos los "bloqueados" por CBS y FOX en octubre y el Monday Night. En octubre, la CBS no había bloqueado el Broncos-Patriots (se había reservado el Eagles-Jets). Y ahora le iba la vida en conservar el choque de Mile High. Tras todo tipo de presiones, la NFL decidió que la NBC no podía cambiar su partido, puesto que el Chargers-Ravens sí tenía interés, dado que ambos equipos siguen teniendo opciones de playoffs. Polémica decisión, porque la NBC paga una pasta por poder elegir el mejor partido de la jornada.

Estábamos ante el partido más esperado de la temporada regular. Sin duda. Tebow contra Brady.

El fenómeno Tebow, un fenómeno sin precedentes, con el que el fenómeno fan ha llegado a la NFL. Un fenómeno que levanta pasiones, a favor y en contra. Yo, aunque sus locazas se ofendan, me descojono. Sí, me descojono y no dejaré de decir lo que pienso sobre ello. Como de cualquier otro jugador o equipo. Este blog se llama Rudeza necesaria y mientras exista intentará hacer honor a su nombre. Los ofendidos, que se vayan a tomar por culo.

¿Qué pienso de lo sucedido el domingo? Pues que Tebow hizo un partido decente en ataque, pero tanto sus errores como los de sus compañeros fueron muy graves y acabaron costándole el partido a Denver.

El choque comenzó inusualmente bien para el ataque de los Broncos. Anotaron en sus dos primeros drives ofensivos. Territorio desconocido para el ataque dirigido por Tebow. ¿Cómo sorprendieron a los Patriots? Corriendo una vez tras otra. Quién lo iba a decir, ¿verdad? Los bloqueadores de Denver abrían túneles que ni el doctor Flammond.


Sin embargo, Tebow no rindió en defensa y en equipos especiales tan bien como las semanas pasadas. Y sin defensa, estos Broncos están abocados a la derrota (salvo que jueguen contra los todopoderosos Minnesota Vikings). Brady y compañía destrozaron a la defensa de Denver. Demasiadas armas tiene ese ataque aéreo.

La baja de Brian Dawkins se notó. Fijaos que en su día defendí la alocada teoría de que la mejoría defensiva de los Broncos se debía a la recuperación de jugadores clave que estaban lesionados (Bailey, Dumervil y Dawkins), que durante la era Orton habían sido baja o habían jugado tocados. A eso y a que, en general, las defensas han ido ajustándose a medida que avanzaba la temporada. Sé que esa explicación es disparatada, porque la mejoría tiene que deberse a la presencia de Tebow, que ejerce una presión virtuosa en las psiques de sus compañeros (y negativa en la de sus rivales, léase Marion Barber). Pero no está de más destacar que cuando falta una de las piezas claves de la defensa, el equipo se resiente. Y claro, cuando te topas con un ataque como el de los Patriots, una baja así resulta devastadora.

Más aún cuando el ataque y los equipos especiales la lían. Una de las mayores virtudes de este ataque cavernícola (aclaro que no uso la palabra cavernícola en sentido despectivo, sino para describir su primitiva estrategia; primitiva tanto desde un punto de vista histórico --el playbook de los Broncos parece sacado de los años 30-- como actual --la estrategia ofensiva es más propia de equipos universitarios o de instituto--) era que no cometía errores. No perdía el balón. Esa es una virtud muy importante. La carrera es menos arriesgada que el pase. Pero este domingo, en el segundo cuarto, el ataque de los Broncos perdió dos balones. Sendos fumbles de Lance Ball y Tim Tebow.


Una tercera pérdida, en un retorno de punt, terminó por condenar a los Broncos. A pesar de que en el 4.º cuarto Denver se puso a 11, esta vez no hubo milagro. El ataque de los Patriots no cometió el mismo error de otros rivales de Denver, que en vez de usar sus ataques para atacar los usaron para defender. Los ataques suelen estar diseñados para atacar en vez de para defender, por lo que resulta contraproducente utilizarlos para aguantar un resultado y no para ampliarlo. Belichick ordenó usar la no huddle, que New England ejecuta con maestría, y ahí se acabó el partido del siglo.

Bueno, por pura coherencia, los que achacaban el excepcional rendimiento defensivo y de equipos especiales de Denver a Tebow deberían responsabilizar al quarterback de la derrota de ayer. La verdad es que no tengo muchas esperanzas de que las locazas sean coherentes. Me temo que de lo bueno sí tiene culpa Tebow, pero no de lo malo. Mi opinión personal, ya en serio, es que ni fue tan culpable de las últimas victorias (sobre todo la última, que tócate las pelotas qué potra) ni lo es de esta derrota. Cuando un ataque tiene una capacidad anotadora tan limitada, el éxito depende de la defensa. Si la defensa consigue parar al rival y anotar, los Broncos pueden ganar. Si no, es muy complicado.

Por mucho que algunos analistas consideren que este estilo de ataque va a revolucionar el football, yo sigo sin verlo. ¿Anota mucho? No. ¿Consigue muchas yardas? Tampoco. ¿Monopoliza la posesión del balón? Por mucho que algunos (supongo que sin contrastar los datos) lo defiendan, es mentira. Pues qué queréis que os diga, que no veo argumentos, más allá del ruido mediático, para prever una revolución estratégica. Quizá suceda como con la moda wildcat popularizada con los Dolphins hace tres temporadas, pero no termino de verlo.

Eso sí, comentaba este lunes con un colega que a mí me divierte mucho ver atacar a los Broncos. Es una propuesta diferente y bastante alocada. Ver al quarterback correr como un pollo sin cabeza por el backfield, rebotando cual bola de pinball contra bloqueadores y defensores es divertido. Algunas veces consigue progresar.


Otras, no.


No lo querría para mi equipo, pero como los aficionados de los Broncos están a gusto con este estilo, supongo que seguirán con él. Dicho lo cual, como decía a principio de temporada, creo que Tebow puede ser un jugador muy aprovechable, para el que su equipo debe tener preparado un pack de jugadas, pero al que sigo sin ver como every-down-quarterback.


Adiós a la perfección de los Packers. El resultado final del partido de Arrowhead es muy engañoso. Green Bay perdió por solamente 5 puntos, aunque la diferencia de juego fue muy superior. Los Chiefs hicieron casi todo bien y los Packers casi todo mal. ¿Cómo es posible que uno de los peores equipos de la NFL hasta el momento, con entrenador y quarterback nuevos, ganase a los hasta ahora invictos Packers? Lo explicamos a continuación, línea por línea.

Comenzamos por el enfrentamiento entre el ataque de Green Bay y la defensa de Kansas City. Los Chiefs son el primer equipo que deja a los Packers por debajo de 20 puntos. El mínimo anterior eran 24. Por primera vez esta temporada, Aaron Rodgers obtiene un passer rating inferior a 100 (80,1). Por primera vez desde 2009, el passer rating de Rodgers es inferior al del quarterback rival (entonces fue frente a los Steelers de Roethlisberger, en un partidazo de ambos pasadores). ¿Cómo consiguieron parar los Chiefs a este ataque hasta ahora imparable? Asfixiando a Rodgers y agobiando a sus receptores.

La presión de la línea defensiva de Kansas City fue brutal. Los protectores de Rodgers eran incapaces de contener a los pass rushers de los Chiefs, especialmente Tamba Hali. La protección venía fallando demasiado las últimas semanas, pero esta jornada simplemente no existió. Era uno de los puntos débiles de Green Bay, y este domingo se agravó. Cayeron dos jugadores de línea ofensiva más. Primero cayó Bryan Bulaga, el jugador de segundo año que venía completando una excepcional temporada (aunque ya es la segunda lesión que sufre). Después, el novato Derrek Sherrod, que se va a perder lo que queda de temporada. Sherrod, elegido en primera ronda, venía siendo un auténtico desastre. Jugaba porque no había otra alternativa. O Bulaga y Clifton se recuperan, o los Packers tendrán graves problemas en enero.

Los Chiefs también supieron anular a los receptores de los Packers. Y algunos se anularon ellos mismos. La cobertura comenzaba con empujones dentro de las cinco yardas en las que se permiten. Esto retrasaba y dificultaba las rutas. A partir de ahí, los receptores no conseguían desmarcarse. Y cuando lo conseguían, se les caía el balón. Hablo de Jermichael Finley, cuyo futuro en Green Bay no está nada claro. Finley dejó caer los cuatro primeros pases que Rodgers le envió. Todos ellos atrapables. No creo que Green Bay dé a Finley mucho por renovar. Seguro que otros equipos sí. Y Finley no fue el único que cometió drops imperdonables. También Donald Driver. Jordy Nelson estuvo muy bien cubierto. Solo Randall Cobb resultaba fiable. ¿Jenningsdependencia? No diría tanto, pero su vuelta seguro que ayuda mucho.

Aaron Rodgers tampoco estuvo al nivel que acostumbra. Falló pases que no suele errar, estuvo menos preciso de lo habitual y forzó otros difíciles de atrapar. ¿El juego de carrera? Escaso. Solo 18 intentos, que no fueron del todo mal (5,7 yardas por intento), pero solo un running back puro, Ryan Grant, estaba disponible. Los Packers también necesitan la vuelta de Starks o Saine, los otros dos corredores.

El choque entre defensa de Green Bay y ataque de Kansas City también se lo llevaron los Chiefs, que aplastaron a los Packers en el 95% del campo. Hubo un 5%, entre la yarda 5 de Green Bay y la goal line, donde la defensa de Green Bay se impuso casi siempre. 438 yardas, nada menos, consiguió el ataque de Kansas City. Lo de siempre. La defensa de Green Bay es un puto desastre. Bueno, en las últimas pulgadas del campo sí que rindió. Cuatro veces llegaron los Chiefs hasta dentro de la 5 de los Packers. Tres field goals y un turnover on downs. A la quinta, anotaron su único touchdown. De ahí la igualdad en el marcador. Los Chiefs fueron incapaces de capitalizar sus llegadas a la red zone.

Pero esta vez, la defensa de los Packers no recuperó ningún balón vía fumble o intercepción. Y McCarthy está 0-9 cuando la defensa no consigue forzar ninguna pérdida de este tipo.

Peter King tuiteaba hoy un dato estremecedor. Los Packers, con uno de los ataques más productivos de la historia de la NFL, han conseguido el mismo número de yardas ofensivas que las que han concedido en defensa. 5569. Que este equipo esté 13-1 con esos números, un milagro.

Párrafo aparte para Kyle Orton. El causante de los males defensivos de los Broncos no perjudicó mucho a la defensa de los Chiefs en su debut de titular. Podría decirse hasta que ayudó a su defensa. Kansas City acaparó el balón durante 36 minutos y 11 segundos, casi 13 minutos más que los Packers, con drives muy largos y equilibrados, que permitían a la unidad defensiva reponer fuerzas para su enfrentamiento con Rodgers y compañía.

También fallaron (aunque menos) los equipos especiales de Green Bay. Mason Crosby falló dos veces un field goal, que chutó exactamente igual de mal. Era lejano, pero en un partido como este, esencial.

Finalmente, en la banda tampoco anduvieron muy hábiles. No supieron manejar los elementos. En una jugada que termina en la 1 de Green Bay, un jugador de los Chiefs comete un fumble que termina saliendo fuera del campo por la end zone. Los árbitros no lo ven, con lo que el drive de los Chiefs se reanuda en la 1, pero la repetición muestra lo anterior. Eso es touchback y balón para Green Bay. McCarthy no pide el challenge y el drive termina con tres puntos para Kansas City. Ni los elementos.

¿Vendrá bien esta derrota a los Packers? No son pocos los que lo dicen. Puede ser. Lo que nunca viene bien son las lesiones. Los Packers hicieron todo lo posible por ganar este partido, que nadie lo dude. Todo. Simplemente, los Chiefs fueron mucho mejores.

La sorpresa

El domingo de las sorpresas. Qué desastre de quinielas. Green Bay palmando en Kansas City; los Colts consiguiendo su primera victoria ante los Titans; los hasta ahora primeros de la AFC cayendo estrepitosamente ante los Panthers; Seattle ganando en Soldier Field; los teóricamente desahuciados Eagles destrozando a los Jets, que parecían en forma; y los líderes de la AFC Norte perdiendo de paliza ante los últimos del Oeste.

¿Qué hizo el ataque más anotador, el de Green Bay? Quedarse en 14 en Kansas City. ¿Y la defensa más fiable, la de Baltimore? Encajar 34 puntos y más de 400 yardas. Locura total.



De Elite ¿a Eliminación? Dejo para comentario aparte el desastre de los Giants ante los Redskins. Sé que la derrota bien puede deberse a mi implacable gafe. Cada vez que apuesto por un equipo de la NFC Este para llevarse la división, palma. Siempre. Y claro, esta semana les tocaba a los Giants. Aún así, perder de esta manera ante Washington es muy sorprendente y decepcionante.

Tras la derrota ante los Seahawks en su estadio en la quinta jornada (también sorprendente) Bill Simmons transcribía el e-mail de un lector suyo en el que aseguraba que la apuesta por Seattle en ese partido estaba cantada. Recordemos que Seattle ganó con un combo de quarterbacks estelar. Primero Tarvaris Jackson y luego Charlie Whitehurst. Pero la principal causa de la derrota de los Giants fue Eli Manning y sus pérdidas. El lector de Simmons comentaba que cada vez que la gente cree que Eli es muy bueno, este nos recuerda en su siguiente partido que no lo es. Después de que Simmons hubiese apostado por los Giants en aquel partido, esto le decía el lector:

"I honestly can't believe you would take Eli in an obvious 'people think I am good again so I will show them how bad I can be' game. It seems like he has a couple of these every year. If not for the Victor Cruz tip catch TD and Seattle fumbling on the 3, this game would have gotten out of hand. I actually took the Seattle moneyline on this game I felt so strongly Eli would have one of his trademark games. I love seeing that mopey face after a pick 6. It brightens my whole day".

Pues eso, que cuando creíamos que lo había superado, Eli hizo un partido "la gente cree que soy bueno otra vez, así que voy a mostrarles lo malo que puedo llegar a ser". Tres intercepciones, ningún pase de touchdown y uno de los principales responsables de la inmensa cagada que cometieron el domingo. El partido se resume en la siguiente secuencia: Eli Manning completa lo que parece un pase de touchdown  a D.J. Ware, con nueve minutos por jugarse. En la revisión, el touchdown se anula y la jugada siguiente (tercer down) comienza en la 2 de Washington. Ese tercer down concluye con otro touchdown anulado por holding, y en el cuarto down Manning sufre un sack.

Aunque no deba sorprendernos, cagadas como esta de los Giants nos dejan de piedra.

Extrañas apariciones estudiantiles. Un par de sorpresas relacionadas con el Estu. Ambas al hilo de y durante el Broncos-Patriots. Primero, tras este espectacular sack de Dumervil (en la repetición se aprecia cómo Tebow infunde fuerzas al defensor de los Broncos)...


...desde la cuenta oficial de Twitter del Estu tuitean "Brady come un poco de Dumervil". El tweet lo borraron poco después de publicarlo, y aclararon a varias personas que preguntaban de qué coño hablaban que era un error. Pero me sorprendió mucho (y positivamente) que el que lleva esa cuenta sea aficionado a la NFL.

Y después, durante la retransmisión del Plus, Daimiel le pregunta a Andrea Zanoni de qué equipo es. Dice Daimiel que cree que de Pittsburgh. Zanoni lo niega, dice que no es de ningún equipo y que si lo fuese lo diría. Revela que, realmente, solo es de dos equipos. De la Sampdoria de fútbol y... del Estu. ¿Cómo? ¿Ha dicho "del Estu"? Pasan unos minutos y me quedo dudando. Pero vuelve al tema y lo confirma. Que sí, que sí, que dice que es del Estu, que no lo sigue intensamente (da la sensación de que muy poco), pero se declara seguidor del equipo de baloncessto correcto.

Evidentemente (que diría él) esto le hace ganar muchos puntos a Andrea Zanoni. Muchos.

Todo sigue igual

Los Bills siguen en caída libre. Desde la lesión de Fred Jackson (incluso antes), los Buffalo Bills se han convertido en una caricatura del equipo que lideró la AFC Este al principio de la temporada. Séptima derrota consecutiva para un equipo que no vence desde octubre (estaban 5-2), cuando los Dolphins, contra los que palmaron, marchaban 0-7. Ahora ambos están 5-9. Sobre esta poco sólida base, algunos pretenden defender a Fred Jackson como MVP. Maldita la hora en la que se lesionó Peyton Manning y se puso de moda la gilipollez de querer defender que un jugador ausente debe ser MVP. La tuvimos con Manning, que como coña no está mal, la volvimos a tener con Jay Cutler y ahora con Fred Jackson. Ya vale. Pero qué bien habían empezado los Bills la temporada y cómo la terminan. Como siempre, instalados en la mediocridad. La semana que viene reciben a los Broncos de Tim Tebow. Que nadie dude que una nueva derrota de Buffalo se vendería como un milagro. Encima en Nochebuena. La hostia. Por cierto, tras haber firmado una muy jugosa renovación de contrato, se especula ahora con la posible resolución del acuerdo entre Fitzpatrick y los Bills. La verdad es que su rendimiento ha empeorado significativamente desde que renovó, pero tampoco creo que esté a un nivel "desconocido" para Buffalo.

John Skelton y Patrick Peterson, garantía de remontada y éxito en la prórroga. Supongo que habrá que empezar a hablar de la leyenda de John Skelton. Si los partidos los ganan los quarterbacks (NO), este tiene mejor balance que todos menos Aaron Rodgers. 5-1. Si los quarterbacks son los que deciden los partidos en los últimos cuartos (TAMPOCO), este lleva mejor registro que Tim Tebow. No fue una estrella universitaria, no atribuye sus resultados a la divinidad y es feo, pero con él a los mandos los Cardinals han vuelto a ganar in extremis. Otra vez en la prórroga, y otra vez tras un retorno de punt de Patrick Peterson (cuándo coño van a dejar de lanzarle punts, me pregunto), Arizona vence y se pone 7-7. Con probabilidades (no digo "posibilidades" porque lo que se mide es la "probabilidad", no la "posibilidad") matemáticas no nulas [corregido, gracias a Eduardo por su comentario] de entrar en playoffs, aunque lo tienen chunguérrimo (la victoria de Detroit hizo mucho daño a todos los perseguidores de los Lions).

Todo cambia

Indianápolis gana casi un año después; Green Bay pierde un año después. De los Packers ya hemos hablado y mucho, así que ahorrémonos más líneas sobre ellos. Este domingo se cumplía un año menos un día desde su última derrota. Desde que ganaron los Colts por última vez también hacía. Fue precisamente ante Tennessee, el 2 de enero. Puede que la era Matt Hasselbeck, que tan bien había comenzado, haya llegado a su fin. Jake Locker ha mostrado buenas maneras en lo poco que ha jugado, por lo que cabe prever que su oportunidad llegue en breve. Pero lo que realmente necesitan los Titans es que Chris Johnson honre un poquito su contrato. De nuevo, la exestrella de la NFL se queda en la cincuentena de yardas. Tiene delito perder contra unos Colts en los que su quarterback titular, Dan Orlovsky, consigue 82 yardas de pase. No, no me he comido ningún número, ochenta y dos.

Peligrosa victoria de los Colts que, por cierto, no tienen asegurado el número 1 del draft. Anda que como hagan la gracia de vencer algún partido más, veréis qué risa.

Estos Eagles y estos Chargers son otros. A buenas horas, sí, pero como los resultados de terceros se porten bien con ellos (no es tan complicado) veréis qué risa si se meten en playoffs. Tras la depresiva imagen que dieron en Seattle, los Eagles acumulan dos victorias consecutivas. Su defensa, por fin, tiene la pinta que se suponía en agosto. Las cuatro pérdidas provocadas a los Jets fueron decisivas. Jason Babin tiene el récord de sacks en una temporada a tiro. En ataque, LeSean McCoy está a un nivel estelar y Michael Vick de vuelta. Un peligro. Ante los Jets cambiaron radicalmente su triste cara y mostraron lo que prometían. El que cambió su buena cara de las últimas semanas también fue el amigo Mark Sanchez, aunque este volvió a la más habitual.

San Diego parece también confirmar su cambio positivo. Ojo porque no sería la primera vez que se meten de milagro en playoffs. Insisto, en 2008 los Chargers llegaban a diciembre con 4-8 y los Broncos con 8-4. Una sola victoria de Denver o una sola derrota de San Diego daba a los Broncos el campeonato de división. Y los Chargers se la llevaron. 8-8. Este año es menos difícil. San Diego es el mejor equipo de esa división y por fin está jugando como tal. Por fin Rivers no la caga. Por fin Ryan Mathews responde a lo esperado cuando lo eligieron en la primera ronda del pasado draft. Su defensa también responde. Eso sí, cuentan con Takeo Spikes, un jugador que está maldito. A pesar de que es un buen jugador y ha militado en buenos equipos, jamás ha pisado unos playoffs. No soy yo el único gafe.

Lo mejor

Tamba Hali. El principal culpable de la primera derrota de los Packers. La temporada de Hali es excepcional. También lo fue la pasada. Pocos jugadores atormentan a offensive linemen y quarterbacks como él. Tres sacks, un fumble forzado y constantes agobios a Aaron Rodgers. Su aportación debió ser incluso mayor, puesto que en esta jugada Marshall Newhouse comete un holding en la end zone, es decir, que debió señalarse un safety.


Drew Brees. Tras semanas pensando que la carrera por el MVP carecía de sentido, porque estaba más que adjudicado a Aaron Rodgers, el pequeño bajón de este y el subidón de Brees hacen que tengamos debate. Sí, creo que la temporada de Rodgers sigue siendo mejor que la de Brees, pero ya no tanto. No está tan claro. Tras destrozar a la débil defensa de Minnesota, Brees se queda a unas trescientas yardas del histórico récord de Dan Marino. Le va a sobrar tiempo. Lleva más yardas que Rodgers, un porcentaje de pases completados mejor que el de Rodgers... Y ya. Porque Brees lleva menos pases de touchdown (37 a 40), más intercepciones (casi el doble, 11 a 6), menos yardas por intento de pase (8,20 a 9,22) y un passer rating sensiblemente peor (109,1 a 120,1). Ah, y su equipo lleva dos derrotas más, hecho que siempre influye al decidir el MVP. En cualquier caso, la segunda mitad de temporada del quarterback de los Saints está siendo brillante. En Minnesota, hizo añicos a la débil defensa de los Vikings en tres cuartos. 32/40 (barbaridad), 412 yardas (barbaridad), 5 pases de touchdown (barbaridad) y 149,2 de passer rating (barbaridad). El jugador más en forma del equipo más en forma.

LeSean McCoy. McCoy se convirtió este domingo en el jugador con más touchdowns totales (20) y de carrera (17) de la historia de los Eagles en una temporada. Anotó 3 y superó otra vez las 100 yardas de carrera. Es el segundo máximo corredor de la NFL, solo por detrás de Maurice Jones-Drew (que juega en un equipo en el que el ataque aéreo simplemente no existe). Shady McCoy, la mejor noticia del ataque de los Eagles. También es la mejor arma ofensiva para los dos partidos que le restan a Philadelphia, aunque a Andy Reid le guste tan poco tirar del ataque por tierra.

Calvin Johnson. Tiene delito lo de los Raiders, que Calvin Johnson te pille la espalda cuando lo único que tienes que evitar es que te anoten un touchdown. En fin. Que qué partido de Megatron. En el momento más importante de la temporada apareció de nuevo Calvin Johnson. 9 recepciones, la barbaridad de 214 yardas y 2 touchdowns.


Jugada de engaño de la semana. Todos creen que la lleva Newton, pero no es así.


Ron Rivera reveló al terminar el partido que diseño esta jugada inspirándose en esta otra de la película Little Giants (si el vídeo no reproduce automáticamente la jugada en el momento adecuado, saltad al minuto 7:42):


Lo regulero

Los Dolphins, los menos malos de Florida. Es el estado con más franquicias de la NFL. También el que acumula más derrotas y asientos vacíos en sus estadios. Florida football, baby. Jaguars, Buccaneers y Dolphins. Vaya tres. Los dos primeros están completando una temporada indigna. Miami no tanto. Tras un inicio pésimo, es hoy un equipo competitivo. Y hay que reconocer que Reggie Bush, al que le había dado bastantes palos por lo mucho que cobraba y lo poco que aportaba, está contribuyendo a ello. 203 yardas de carrera para Bush. Números tan brillantes como inútiles en estos momentos. Los Dolphins son el mejor equipo de Florida. O el menos malo. Poco consuelo para un equipo que aspiraba a más.

Cardinals y Seahawks, ¿demasiado tarde? La temporada pasada, el campeón de la NFC Oeste se quedó en 7 victorias. Más derrotas (9) que victorias. Esta temporada, ya hay tres equipos que han igualado o superado ese registro. San Francisco, con 11-3, es campeón de división. Arizona y Seattle, tras un inicio mediocre, están 7-7. Jugar contra ellos ha dejado de ser un chollo. Los Cardinals llevan cuatro victorias seguidas. Los Seahawks han ganado 5 de los últimos 6. Solo los Rams decepcionan. Sin embargo, los buenos resultados que el último mes acumulan Arizona y Seattle serán seguramente insuficientes para conseguir plaza de playoffs. Si Detroit hubiese perdido en Oakland habrían tenido serias opciones. Ahora, necesitan que los Lions palmen ante San Diego y en Green Bay y ganar sus dos partidos.

Lo peor

Caleb Hanie. Queda claro que no se puede juzgar a un quarterback por su rendimiento durante un par de cuartos en un partido en el que no tiene nada que perder. La experiencia Hanie es un puto desastre. Igual que digo que los quarterbacks no ganan ni pierden solos, digo que varias derrotas de Chicago son consecuencia de graves errores de Hanie. No la semana pasada, cuando Marion Barber decidió ser el protagonista principal del Tebow Time. Pero en Oakland, ante Kansas City y este domingo ante Seattle sí. Con 14-14 y muy presionado, Hanie lanza una intercepción decisiva e imperdonable. ¿Cutler MVP? ¿Forté MVP? Por seguir con la tontería, digo.

Tampa Bay Buccaneers. Nadie está jugando peor que ellos. Nadie. Lo del sábado fue de vergüenza ajena. En un partido en prime time, ante una audiencia masiva y jugando en casa, los Bucs fueron humillados por Dallas. El partido duró menos de dos cuartos. El ataque de Tampa, desastroso. La defensa, inexistente. En ataque, un turnover y sendos punts tras tres y fuera. En defensa, los Cowboys siempre anotaban. Qué desastre.

La AFC Norte sufre por el oeste. Escaldados salieron Steelers y Ravens de sus visitas a la costa oeste. Baltimore nos recordó otra vez (y van...) que de un ataque guiado por Joe Flacco no te puedes fiar. Algo que sí hacen, y en exceso, los Ravens, y por eso les suceden cosas como las del domingo. Ray Rice es el jugador que más yardas ofensivas acumula de toda la NFL (incluyendo carrera y recepción). En San Diego, le dejaron correr solamente 10 veces. ¿Creéis que es casualidad que las cuatro derrotas de Baltimore hayan llegado en los cuatro partidos en los que menos intentos de carrera ha realizado Ray Rice?


Tras las derrotas de Ravens y Texans, a los Steelers se les presentaba una oportunidad de oro para conseguir el primer puesto de su división y de su conferencia. Los 49ers, que venían de perder dos de los últimos tres partidos, eran su último obstáculo serio. Quizá por eso forzaron a Roethlisberger. Y cuando un quarterback juega mermado ante una defensa potente, se nota. Una cuota importante de responsabilidad de la derrota la tienen las tres intercepciones y el fumble perdido de Ben Roethlisberger. Siempre superado por el front four Niner, con unos Smiths estelares. Los dos de la defensa, Aldon y Justin, y también el quarterback, Alex. Todos ellos apagaron las luces de los Steelers.

Ah, los Browns también palmaron en su partido en el oeste. Pero esto no es noticia.

La lesión de Johnny Knox. Os ahorro el vídeo. Si os va el morbo, las imágenes están en YouTube. Uf. Para haberse matado. Y no exagero. Esto sí que es un milagro.

Cómo está la clasificación para playoffs y cómo creo que quedará

Aquí estoy, para ejercer de gafe. He recibido un par de sugerencias por Twitter. Porque la verdad es que soy implacable: equipo por el que apuesto en la NFC Este, equipo que palma. Damián, aficionado de los Eagles, me pide que por favor no apueste por Philadelphia. Javier Orcali McFly, de los Packers y que teme a los Eagles en enero, me pide que lo haga. Pero esto no va así. La apuesta tiene que ser sincera. Y, sinceramente, apostaré por Dallas. Es quien mejor lo tiene y quien menos mal está jugando. Malditos quedan los Cowboys.

La cosa así va en la NFC:


Y así creo (sinceramente) que termina:

1.- Green Bay Packers. Una victoria propia o derrota de San Francisco asegura el primer puesto de la NFC. Los Hanie Bears llegan por Navidad.

2.- San Francisco 49ers. No esperaba su victoria frente a los Steelers. Hecho lo teóricamente más complicado, les queda lo teóricamente más fácil: Seattle y St. Louis. Si ganan esos dos, como poco, segundos de la NFC.

3.- New Orleans Saints. Insisto, el equipo más en forma de la NFL. Jugarán contra Atlanta el próximo lunes y, quizá, también en la ronda de wild card.

4.- Dallas Cowboys. Gafados quedan. Pero es un gafe sincero. Son los que mejor lo tienen para llevarse la NFC Este.

5.- Atlanta Falcons. En caso de empate con Detroit, ganan los Falcons. A Detroit le quedan dos partidos complicados (San Diego y Green Bay en Lambeau); Atlanta tiene uno asequible en la última jornada (Tampa) y otro complicado (Saints).

6.- Detroit Lions. Su remontada en Oakland los deja a una victoria de asegurarse los playoffs por primera vez en el nuevo milenio.

En la AFC la clasificación así marcha.


Y así creo (también sinceramente) que termina:

1.- New England Patriots. Si ganan a Miami y Buffalo, el primer puesto de la AFC es suyo. Fin de ciclo.

2.- Baltimore Ravens. Cleveland y Cincinatti, lo que les queda para ser campeones de la AFC Norte y conseguir librar en primera ronda de playoffs.

3.- Houston Texans. Uf, qué mala pinta la de estos Texans el domingo.

4.- Denver Broncos. En una AFC Oeste que cualquiera puede ganar, el calendario más sencillo es el suyo.

5.- Pittsburgh Steelers. Qué ocasión dejaron pasar esta jornada.

6.- New York Jets. No lo tienen fácil. El calendario de los Bengals es más sencillo. Esta semana, derbi entre los dos equipos de New Jersey.

* * *

Recuerdo de nuevo que la próxima jornada se disputa casi íntegramente el sábado 24 de diciembre. Solo el Detroit-San Diego, el Dallas-Philadelphia y el Seattle-San Francisco serán a la hora de cenar. Que no es poca cosa, por otra parte. Algunos tendremos que verlos en diferido. Llega esa época que cuando te encuentras con alguien tienes que decirle feliz Navidad o feliz año. Qué puta mierda, lo odio.

10 comentarios:

  1. Hola, me encanta tu columna y disfruto tu obsesión con el uso correcto del lenguaje, sin embargo cuando dices que los Cardinals tienen probabilidades matemáticas de entrar en los playoffs, primero es redundante porque la probabilidad es una rama de la matemática, no hay otro tipo de probabilidad. Segundo, hablando estrictamente en un lenguaje matemático, decir que tienen probabilidad de entrar en los playoffs no significa nada, habría que decir que tienen probabilidad no nula o mayor que cero, porque los eventos pueden tener probabilidad cero, lo que significa que no ocurrirán.
    Saludos,
    Eduardo.

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  2. hola, hemos disfrutado de una semana de infarto, donde los q tenían más probabilidades de ganar han fallado, con lo que se demuestra q la teoría de la probabilidad condicionada funciona.
    También creo que new england conseguirá el primer puesto, cuestión de probabilidad o azar o viceversa.
    Un placer como siempre leer este magnifico blog

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  3. Ya lo he comentado en algún otro sitio, pero como de malos tienen que ser los QBs suplentes de los Steelers para que juegue BigBen cojo, además del evidente riesgo de agravar la lesión.
    El día en el que para tí los Packers hacen absolutamente todo mal ( drops de receptores, fallos de Rodgers, errores de la banda, muchas yardas permitidas, etc...) pierden solo de 5. El día que solo falla algo victoria segura.
    Aunque Brees supere el record de Marino, y se esté marcando un temporadón, el MVP debería ser para Rodgers.
    Me encanta Brady, y como se levantó después de comer un poco de Dumervil.
    Aunque no viene al caso, y aunque se pagó mucho por draftearlo, Julio Jones le va a salir barato a los Falcons.

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  4. Da gusto leer hoy el blog. 16 veces es nombrado Tebow. Ya nadie se resiste al magnetismo de Tim. Ni Rodgers acapara tal atención. Gracias de corazón por el seguimiento.

    Respecto al partido contra los Patriots, estamos de acuerdo que Tebow jugó un decente partido, aunque no fue suficiente ante unos Patriots que hicieron pagar muy caros los errores de los Broncos, Tebow incluido. Claro que jugaban contra los Patriots de Brady y no contra los Chiefs de Orton.

    Hasta Dios el séptimo día descansó, por lo que supongo que Tim, tras seis victorias consecutivas, se merece el mismo descanso.
    Así sus detractores pueden aprovechar los cuchillo que llevaban un tiempo afilando y corrían peligro de oxidación.

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  5. Esta nochebuena que no hay tamborilero, no hay excusa para NO ver NFL....

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  6. Que 555 haga una rotación entre Dallas y Giants en campeón de la NFL Este cada semana es un plan maléfico para que pase una carambola y ganen los Eagles? xDD

    Buen articulo para un excelente blog!

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  7. 1. ¿Fin de ciclo de New England? Ya me lo explicarás.
    2. Tebowed: tú y otros, con vuestras alusiones religiosas, lo único que hacéis es perjudicar a Tebow, al que solo hay que juzgar hablando de football, no de pseudorreligión.

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  8. Florida es el estado con más equipos de la NFL... Junto con California (Raiders, 49ers y Chargers). (típica puntualización tocapelotas)

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  9. Bueno, espero que no me fallen los Jets esta semana y ganen, por que la victoria de Philly ya esta hecha con la apuesta de 555 por Dallas.

    Que miedo el duelo Sanchez-Maning...Cualquier cosa puede ocurrir.

    No se por que, pero me da que se va a decidir la division en la ultima jornada.

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  10. Es curioso como desde que apareció todo este fenómeno Tebow, parece como que el mundo del football se divida en pro tebows y anti tebows, y la verdad es que es muy gracioso ver como unos y otros os acusáis mútuamente de los mismos comportamientos. Si se puede tener una opinión lógica y objetiva sobre cualquier jugador, ¿por qué este caso es diferente?
    Sólo una puntualización: cuando dices que la playbook de Denver es cavernícola, más propia de los años 30, imagino que lo dices porque corren mucho y usan options (es curioso, si un equipo pasa 40 veces y corre 6 es un equipazo, pero si es al revés es una mierda). En alguna ocasión has dicho que no sigues la NCAA, y se nota, porque la ofensiva de Denver (o mejor dicho, alguna de las formaciones y jugadas utilizadas por Denver) es una spread option offense, que es un estilo ofensivo bastante moderno y usado en los últimos años en la NCAA. No creo que en los años 30 se vieran demasiados snaps desde la shotgun.

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