jueves, 5 de enero de 2012

Reparto de premios de la temporada regular 2011-2012

Esta semana anunciaba la NFL que, por primera vez, iba a montar un show televisado en el que se entregarían los premios a los mejores jugadores y jugadas de la temporada. El espectáculo tendrá lugar la noche antes de la Super Bowl. NFL Honors, se llamará, aunque quien decide quiénes son la mayoría de los agraciados no es la propia NFL, sino Associated Press. Hasta ese día no conoceremos quién es el MVP de la temporada regular, o quién ha sido el mejor entrenador, a pesar de que los votos de los 50 periodistas que deciden han sido ya enviados.

Un pequeño sinsentido, porque en el momento en el que se anuncien esos premios los agraciados pueden haber cometido graves cagadas en los playoffs que devalúen un poco el reconocimiento. Ahora es la hora. Los premios de la temporada regular, recién terminada la temporada regular. Y nada de "temporada 2011". Será "2011-2012". Aunque esta temporada solamente haya habido una jornada en 2012 (la del 1 de enero). Extraña manía la de algunos medios estadounidenses, para los que el campeón de esta temporada será el campeón de la temporada "2011", pese a que los playoffs se disputan íntegramente en 2012. Hasta algunos hablan de "playoffs 2011". Que no. Para evitar confusiones, 2011-2012.

Música. Ahora que vienen los reyes, una de los que se autoproclamaban kings of rock, Gluecifer. Esto es Reversed.



Vamos con los premios. A lo mejor y a lo peor.

Mejor jugador (lo que en Estados Unidos se denomina MVP)

Como apuntaba en mi anterior artículo, el fútbol americano es el deporte de equipo más de equipo que existe. La incidencia de cada individuo en el resultado es menor que en cualquier otro, porque nadie puede disputar los 60 minutos de partido. Los que más juegan, disputan aproximadamente la mitad del encuentro. Los atacantes poco pueden hacer en defensa, más allá de intentar conservar el máximo tiempo posible la posesión para dar descanso a sus compañeros. Poquito más. Y todos son parte de una "cadena de producción", en la que todas las piezas son importantes. Si alguien la caga, el equipo está perdido. Si un bloqueador se equivoca y deja libre a un pass rusher, el pasador recibirá un sack y la jugada será un fracaso. Si el receptor se equivoca en la ruta, o el quarterback lee mal la jugada, tres cuartos de lo mismo. Todos se necesitan. Si algún miembro de la secundaria se equivoca en su asignación de cobertura (busted coverage), el resultado puede ser fatal. La coordinación es capital.

Por ese motivo es complicado otorgar premios individuales, porque el resultado de un partido es producto de muchas pequeñas actuaciones singulares. Pero también es inevitable. Como también es inevitable que estos premios recaigan casi siempre en los jugadores más visibles para el público. Pocos notan el buen trabajo de un offensive tackle. Cuando alguien ve a los Patriots, admira el juego de Brady y sus receptores (tight ends incluidos), y no tanto el de una línea que frecuentemente da tiempo y espacio suficientes a su pasador para que se eche una siestecilla, llame a su familia, y luego dé cómodamente un pase. Es así. Miramos al que tiene el balón. Y el que más lo tiene es el quarterback. Algo menos, el running back. Y un poquito menos, el receptor principal.

Más excepcional aún resulta el reconocimiento al defensor. No suele anotar puntos, de hecho su labor es evitar que se reciban. Y esto se valora menos, aunque algunos equipos basan su éxito en la defensa.

Sin embargo, esta temporada los ataques han dominado a las defensas, sobre todo en la primera mitad. Los líderes de ambas conferencias construyen su éxito desde ataques demoledores, y el hecho de que sus defensas concedan yardas a granel les resulta casi inocuo.

El debate del MVP, tampoco nos engañemos, es este año un duelo entre Aaron Rodgers y Drew Brees. ¿Quién merece más el premio? Para mí, el que mayor valor ha contribuido a construir, y el que mejor temporada ha cuajado, también desde un punto de vista individual, computando no solo los aciertos sino también los errores.

1.- Aaron Rodgers (mejor jugador ofensivo de la temporada)

El MVP no puede ser otro. Y dado que juega en ataque, el premio al mejor jugador ofensivo de la temporada también debe ser para él. No comprendo la diferencia entre "MVP" y "offensive player of the year". Joder, si el más valioso juega en ataque, será el mejor jugador de ataque. Da la sensación de que el "offensive player of the year" es una especie de premio de consolación que se otorga a un jugador cuya temporada es también excelente, pero no lo suficiente para ser MVP. Pues no, un sinsentido.

Decía que solo Rodgers puede ser MVP. ¿Por qué? Pues porque su rival juega en su misma posición y su rendimiento fue peor que el de Rodgers, ni más ni menos. Salvo que no se tengan en cuenta los errores, claro.

El passer rating de Rodgers es más de 10 puntos superior al de Brees. Es superior al de Brees y al de cualquier quarterback en cualquier temporada. Y ese criterio, aun con sus carencias, es el mejor modo para medir el rendimiento de un pasador. Sí, es un poco oscuro y nada intuitivo, pero refleja la realidad: que considerando aciertos y errores, la temporada de Rodgers es mejor.

Es mejor porque cada vez que Rodgers ha intentado un pase, el número de yardas conseguidas ha sido mayor que el de Brees (9,25 a 8,34); es mejor porque ha cometido menos errores graves (intercepciones, 6 a 14); es mejor porque en ningún partido ha lanzado Rodgers múltiples intercepciones, y Brees lo ha hecho en cinco; es mejor porque no solo cuenta la segunda mitad de la temporada, sino la temporada entera, y en la primera mitad Brees ha tenido partidos malos que resultaron decisivos para que su equipo cayese derrotado (5 intercepciones acumula en sus derrotas en Tampa y St. Louis --equipos flojos--); y es mejor porque Rodgers ha contribuido a la creación de un valor superior que al que ha contribuido Brees (14-1 a 13-3). Además, y sin querer quitarle mérito, los números de Brees están un poco inflados en los minutos de la basura, sobre todo en los dos últimos partidos, en los que con la victoria ya asegurada los Saints jugaban para incrementar el número de yardas de Drew Brees.

Con todo, lo mejor para los Packers sería que no le diesen el MVP a Rodgers. Porque Rodgers es un picao, y tiene muy presente todas y cada una de las críticas y desprecios que recibe (sean razonables o no). Rodgers es un rencoroso, nunca olvida que no recibió ninguna beca de una universidad de primer nivel en su primer año en college, ni que pasaron de él 23 veces en el draft. Esta temporada dio nuevas muestras de lo picao que es, al ironizar después del partido inaugural contra los Saints lo fuera de forma que estaba el equipo por no haber organizado entrenamientos voluntarios durante el cierre patronal (los medios apuntaban que los Saints tendrían la ventaja de que Brees había cuidado de sus compañeros organizando estas actividades, mientras que los Packers habían sido unos negligentes). No dudo de que Rodgers está tomando buena nota de los que dicen ahora que es un "producto del sistema de los Packers", y que cualquiera (léase Flynn) lo haría igual de bien en su puesto. El problema es que el MVP de la temporada regular se anuncia la noche anterior a la Super Bowl, y no vendría nada mal ir contando, en su caso, con la motivación tras el desprecio.

Esta semana algunos defienden que Rodgers no es "tan valioso" porque sin él el ataque de los Packers destrozó a los Lions. El argumento tiene su punto, pero solo si equiparamos "más valioso" a "más imprescindible". Aunque son conceptos relacionados, no son iguales. Porque si se aceptase tal equiparación, Peyton Manning o Jay Cutler podrían aspirar al MVP, aunque no hubiesen creado valor. No sabemos qué habría sido de los Packers con Flynn al mando. Sin embargo, sí sabemos que la evolución como jugador de Flynn a la sombra de Rodgers parece excelente. Lo que hace a Rodgers más valioso, porque hace mejores a sus compañeros, también a los suplentes. ¿Y sabéis quién marcó las jugadas de ataque en los dos primeros cuartos del partido contra Detroit? Aaron Rodgers. Si vale hasta para coordinador ofensivo.

2.- Drew Brees

Que la temporada de Rodgers haya sido mejor que la de Brees no quita que la de este haya sido también brillante. Récord histórico de yardas de pase y récord de porcentaje de pases completados (que supera el que él mismo tenía). Brees ha sido el mejor jugador de la segunda mitad de temporada, donde ha dirigido un ataque imparable. Es el líder del equipo más en forma de la competición en estos momentos.

Algunos intentan hacer de menos el rendimiento de Brees aludiendo a que ha disputado 10 partidos en domes, mientras que Rodgers ha jugado solo tres a cubierto y Brady ninguno. Incluso se dice que el récord de Marino tenía más mérito, porque jugaba también contra los elementos. Por ese mismo motivo, dicen que el que realmente ha batido el récord de Marino es Brady, que jugaba en condiciones equiparables. Lo siento, pero no lo compro. Cada cual juega donde le toca. Los elementos no son excusa, ni para bien ni para mal.

*.- Terrell Suggs (mejor jugador defensivo de la temporada)

El asterisco indica que no creo que sea el tercer mejor jugador de la temporada regular, aunque sí creo que fue el mejor defensor, y de ahí la referencia. Me ha resultado complicado decantarme por un mejor jugador defensivo de la NFL. En ataque había mucho donde elegir, en defensa no tanto. Eso no debe sorprender, porque la defensa es una tarea aún más colectiva y oscura que el ataque, donde es más fácil que alguien destaque. Pero igual que digo que me cuesta encontrar un mejor jugador defensivo absoluto, encuentro demasiados buenos defensores novatos (aunque no tan buenos como para considerarlos los mejores de toda la liga).

¿Por qué Suggs? Porque fue el mejor de una de las mejores defensas de la NFL. Los Ravens, el segundo equipo de la AFC, construyen su éxito desde la defensa. ¿Por qué elijo a uno de Baltimore y no de San Francisco, el segundo de la NFC? Pues porque creo que los Ravens han tenido unos rivales de mayor altura, y cuando se enfrentaron San Francisco y Baltimore la defensa de los Ravens se mostró más sólida que la de los Niners.

Suggs es tan bocazas y provocador como buen jugador. 14 sacks, 7 fumbles forzados, 2 intercepciones y 70 placajes adornan su currículum. Aunque quizá más importante que eso es que, en su madurez, Suggs está listo para tomar el relevo de Ray Lewis como líder defensivo de los Baltimore Ravens.

También merecen reconocimiento: Tom Brady, Rob Gronkowski, Jimmy Graham, Patrick Willis, Justin Smith, Jordy Nelson, Haloti Ngata, Brian Cushing, Matthew Stafford y Calvin Johnson.

Jugador menos valioso

1.- Albert Haynesworth

Haynesworth, un jugador muy generosamente pagado (aunque ya no tanto como en Washington) para el rendimiento que ofrece. Un jugador que si quisiese podría ser uno de los mejores defensive lineman de la NFL, pero que no quiere. Resta más de lo que suma. Ahí tenéis los números, es todo un destructor de valor:

- Con él, los Patriots obtuvieron un balance de 5-3; sin él, 8-0.
- Sin él, los Buccaneers obtuvieron un balance de 4-4, con él, 0-8.

Obviamente, Haynesworth no fue el principal responsable de esos resultados. Ni mucho menos. Porque, lamentablemente, su incidencia en el juego es cada día menor. Aporta muy poquito. Su presencia no ha valido nada.

2.- Chris Johnson

¿La peor temporada de 1000 yardas de carrera de un running back? Probablemente. Los números engañan. Sí, Johnson ha conseguido apañar unos números discretos, pero ni eso justifica su astronómico salario (13 millones de dólares en 2011), que él ha llegado a defender sobre la base de su rendimiento pasado. ¿Cobrará algún día el jugador anteriormente conocido como CJ2K (ahora CJ1K) un sueldo acorde con su rendimiento? Los Titans han hecho una temporada razonablemente buena. Son el único equipo con más victorias que derrotas que se ha quedado fuera de los playoffs. Pero si con CJ1K acaban con 9-7, cómo habrían acabado con CJ1K.

3.- Mark Sánchez

El tercer clasificado de esta indeseable clasificación es el quarterback titular de los Jets. Sánchez cobra aún más que los jugadores que le preceden en la clasificación. 14,23 millones de dólares. Siento ser tan plasta con los salarios, pero me resulta inevitable tener este factor en cuenta para juzgar el rendimiento de un jugador. Las expectativas son importantes. Y en su tercera temporada, lejos de progresar, Sánchez sigue mostrándose como un jugador insulso, gris e incapaz de liderar a un equipo con aspiraciones. Si tu entrenador tiene que salir públicamente a defenderte semana tras semana, tu juego está siendo peor del esperado.

¿La maldición del quarterback de USC? Matt Barkley, el siguiente pasador prodigio de esa universidad, llegará probablemente a la NFL en 2013. De esa misma universidad proceden el propio Sánchez, Matt Leinart, Matt Cassel (aunque este era suplente en USC) y Carson Palmer. Su denominador común, la mediocridad.

También merecen reconocimiento: Chad Ochocinco, Gerald McCoy, Matt Cassel, Kevin Kolb, Terence Newman

Mejor novato

1.- Cam Newton

Lo admito, estaba totalmente equivocado con este jugador. Veo poco fútbol universitario. Cuando me coincide, veo los sábados por la tarde y de noche algunos partidos. También alguna bowl (las de la BCS, fundamentalmente) y el partido por el título nacional. Poco fundamento para evaluar la capacidad de un jugador. Los escándalos extradeportivos del entorno de Cam Newton parecían indicar que podríamos estar ante otro caso de estrella universitaria con la cabeza no muy bien amueblada. No es así. Él no tiene culpa de los desmanes de su padre. Su actuación en la final por el título universitario tampoco fue brillante. Veía a un portento físico, pero no demasiado fiable en el pase. Si sufre así ante la defensa de los Oregon Ducks, en la NFL lo pasará muy mal. Ahí no sería tan superior físicamente a sus rivales. En la NFL, además de un físico privilegiado, hace falta cabeza.

Cam Newton ha superado todas las expectativas. Su temporada no ha sido ni mucho menos perfecta, pero su presencia ha transformado a un equipo deprimido en una de las franquicias con más peligro de la NFL. Los Lions de 2010 son los Panthers de 2011. En él, Steve Smith ha encontrado su compañero perfecto (y viceversa). Carolina ha sido casi siempre un equipo competitivo. Ha tenido contra las cuerdas a equipos como Green Bay y Nueva Orleáns, que las pasaron canutas para llevarse una victoria de Charlotte.

Es demasiado temerario en sus pases (17 intercepciones), pero seguramente mejorará en el futuro. Tampoco le han ayudado en ese aspecto desde la banda, puesto que el playcalling ofensivo de los Panthers cargaba a Newton con más peso del conveniente.

Newton ha batido todos los récords de yardas de pase de un quarterback novato. No ha sido tan eficiente como otros (el mejor passer rating sigue estando en manos de Roethlisberger, con 98,1 en 2004, registro del que Newton se ha quedado lejos), pero su potencial es innegable. Además, él representa un paso más en la evolución del quarterback corredor. Es un portento físico que sabe pasar y sabe correr. Ha conseguido 14 touchdowns de carrera, cifra que solo un running back ha podido superar, LeSean McCoy.

Un auténtico temporadón, aunque su equipo no le haya acompañado. Y aclaro que sitúo a Newton por delante de Andy Dalton porque creo que su actuación individual ha sido muy superior. Es verdad que los Bengals han conseguido 9 victorias, por 6 de Carolina, pero hay que ver los calendarios de uno y otro equipo y cómo se ha llegado a ese resultado. Creo que el calendario de Carolina ha sido más complicado, y los Panthers pueden presumir de haber vencido a algún equipo de playoffs (Houston), algo que no ha hecho Cincinnati hasta ahora.

2.- Von Miller

Me ha costado decidirme entre Von Miller y Aldon Smith. Creo que la temporada de los dos ha sido espectacular, pero me decanto por Miller porque creo que ha tenido mayor protagonismo que Smith y que la defensa de Denver ha tenido que tirar más del carro del equipo que la de San Francisco (aunque la defensa de San Francisco también es la base del éxito de ese equipo). Además, Aldon Smith juega al lado de otros jugadores sobresalientes que ayudan a liberar presión a los nuevos (como Patrick Willis, Justin Smith o NaVorro Bowman).

Von Miller ha tenido un impacto inmediato en la NFL. Aunque en las primeras semanas los resultados de los Broncos no fueron buenos, su rendimiento sí lo fue. Además, alguna de sus acciones resultaron decisivas para las victorias de Denver (como por ejemplo, el sack a Mark Sanchez en el último drive del Broncos-Jets).

3.- Aldon Smith

Una de las claves de la temporada de San Francisco y del rendimiento de esa defensa, la mejor de la NFC. Termina con 14 sacks (más que ningún otro novato y que ningún otro jugador de esa estupenda defensa, y 5.º de toda la NFL) y 2 fumbles forzados. Así se debe celebrar un sack, sí señor:


También merecen reconocimiento: Patrick Peterson, Andy Dalton, A.J. Green, Torrey Smith, Julio Jones.

Peor novato

Es un poco cabroncete e injusto dar caña a un rookie. Se dice que hay que esperar unos tres años para poder evaluar si una elección en el draft es acertada. Sin embargo, aquí estamos para repartir. El criterio para elegir a los peores novatos del año es el de posición en el draft y rendimiento. Cuanto antes haya sido elegido y menos haya rendido, peor.

1.- Blaine Gabbert

En descargo de Gabbert hay que decir que contaba con el peor grupo de receptores de la NFL con mucha diferencia. Una absoluta mierda. No tenía a quién pasársela. Y también hay que decir que el rendimiento de otros quarterbacks novatos ha sido anormalmente bueno, lo que deja a Gabbert más en evidencia.

Pero de él se esperaba mucho. Fue elegido en el 10.º lugar del draft, y algunos pronosticaban que sería el mejor quarterback de su promoción. Muy lejos ha quedado de ello. Andy Dalton, por ejemplo, fue elegido mucho después.

Su passer rating, 65,4, es el peor de la NFL. Peor que el de Curtis Painter. 5,36 raquíticas yardas por intento de pase. Poco más que lo que conseguía Jones-Drew por intento de carrera. Penoso. Una nulidad.

Además, Jacksonville contaba con una defensa sólida (6.ª de la NFL) y el mejor running back de la NFL (Maurice Jones-Drew). Y juega en una de las divisiones más flojas de la NFL. Si se defiende y corre bien, y el equipo no consigue más que 5 victorias, la culpa es del juego de pase. El peor de toda la NFL. Y su director era Gabbert.

2.- Jonathan Baldwin

En su descargo hay que decir que las lesiones le perjudicaron bastante, pero de un receptor de primera ronda (número 26) se espera más. Solo 21 recepciones en 11 partidos jugados, únicamente 254 yardas. Demasiado poco para un receptor de primera ronda. Argumentos para los que defienden que en primera ronda, salvo casos excepcionales (Randy Moss, Calvin Johnson) no merece la pena seleccionar a un receptor.

La mejor recepción de Baldwin, esta que no valió por culpa de una absurda infracción.


3.- Derek Sherrod

Los Packers usaron su primera elección en el draft para reforzar su línea ofensiva con la elección de Sherrod. La falta de entrenamientos de offseason puede haber perjudicado mucho a este jugador, pero el mismo problema han tenido todos los novatos. Desde pretemporada se veía que Sherrod no estaba preparado todavía para la NFL. Era un desastre. Bryan Bulaga también parecía verde al principio de la temporada anterior, pero no tanto. En las primeras jornadas, no fue ni convocado, y solo las lesiones de otros jugadores de línea lo llevaron a la banda. Las lesiones continuaron, y Sherrod tuvo minutos de juego. Un desastre. Su temporada terminó en Kansas City, donde se fracturó su pierna derecha tras ser arrollado por Tamba Hali. Una temporada muy poco prometedora para este jugador de primera ronda.

Mejor entrenador

1.- Jim Harbaugh

Esta es fácil. Quién si no. Harbaugh ha justificado esta temporada todo el revuelo que se armó el pasado mes de enero cuando terminaba contrato con Stanford y media NFL y algunos de los equipos universitarios más pudientes se lo rifaban.

Con sustancialmente los mismos mimbres que Mike Singletary, Harbaugh ha sacado el máximo partido a la plantilla de los 49ers. Su fama de buen entrenador de quarterbacks se confirma con el rendimiento que ha sacado a Alex Smith, un jugador bajo constante sospecha al que tampoco le había beneficiado cambiar de sistema ofensivo cada temporada. Pero la principal mejora ha venido en la defensa. Estos 49ers son uno de los equipos más serios de la NFL. La fórmula, la típica de la familia: dureza defensiva, sólida carrera y pase correcto. Su juego no es espectacular, pero sus resultados sí.

Antes de empezar la temporada, muchos predecían un fracaso de Harbaugh (no yo, esta es una de las poquísimas predicciones en las que acerté). Algunos decían que no llegaba hasta diciembre. No fue ni mucho menos así. El entrenador del año, y con diferencia.

2.- Wade Philips

Ya, lo sé, Wade Philips no es head coach. El exentrenador de los Dallas Cowboys es ahora el coordinador defensivo de los Houston Texans. Unos Texans que contaban la temporada pasada con la tercera peor defensa de la liga, y que esta es la segunda mejor. Cambió el sistema base, de 4-3 a 3-4, y la transición no ha podido ir mejor. Jeff Saturday, el mítico center de los Colts, habla del front seven de los Texans como el mejor de la NFL. Nadie ha hostigado tanto al pasador como los Texans. La secundaria también ha ganado con la llegada de Jonathan Joseph. Los Texans, un equipo alegremente ofensivo, la solía cagar por su debilidad defensiva. Y ahora su defensa está en la elite de la NFL.

En todo esto hay que reconocer el mérito de Wade Philips.

3.- Mike McCarthy

Supongo que cuando uno es seguidor de un equipo le ve más defectos a su entrenador (salvo la mayoría de los del equipo-que-no-debe-ser-nombrado, a quienes su entrenador les tiene robado el corazón y de cuya mano se refugian en el reino de la irresponsabilidad y la arrogancia, donde son muy felices). ¡Pepu, pide tiempo, hostia! ¿Es que no ves que Ayoze es un puto desastre, Oltra? Bueno, algo parecido me pasa con McCarthy. ¡Que hay que correr un poquito, por favor!

Sin embargo, alguna culpa tendrá del éxito del mejor equipo de la NFL en la temporada regular. Después de ganar una Super Bowl, el campeón suele empeorar su rendimiento. Tras la cogorza, llega la resaca. No en esta ocasión. McCarthy ha sabido mantener el hambre de su plantilla, especialmente del ataque, que es el área en donde tiene mayor responsabilidad. En un ataque, además, donde abundan los playmakers y escasean los balones (se juega solo con uno), McCarthy ha sabido cortar de raíz cualquier tipo de polémica. Todos parecen centrados (excepto, en ocasiones, Jermichael Finley), los divismos parecen controlados (excepto, otra vez, el de Jermichael Finley). Hasta los suplentes parecen preparados para aprovechar. Muy distinto es el rendimiento defensivo, pero en ese apartado McCarthy tiene menos culpa. Ahí hay que preguntarle a Dom Capers.

También he de decir que me gusta el estilo de McCarthy. Es un tipo muy educado, que evita las polémicas absurdas, y que no necesita recurrir a bravuconadas para motivar a sus jugadores. Él habla de football, y no de gilipolleces. Insisto, me gusta.

Peor entrenador

Para otorgar este reconocimiento, nos basaremos en el talento individual de los jugadores de la plantilla correspondiente y los resultados obtenidos. Los premios se los llevarán los que hayan hecho menos con más.

Curiosamente, ninguno de los premiados ha sido despedido todavía. De hecho, los dos primeros han sido confirmados en su puesto.

1.- Andy Reid

Con el plantillón que tienen los Eagles, y con lo barata que ha estado este año la NFC Este, tiene mucho delito no conseguir llegar siquiera a los playoffs. No se puede conseguir menos con tanto. Un juego aéreo y de carrera explosivos (eso sí, por fin se aprovecha algo a LeSean McCoy) y una defensa que, aunque con algunas carencias (el cuerpo de linebackers necesita mejorar), cuenta con jugadores excepcionales. Con eso, Philadelphia ha sufrido derrotas humillantes e injustificables. Pienso, por ejemplo, en el partido que pierden los Eagles en Seattle, en el que fueron arrollados por los Seahawks.

Los fichajes de Steve Smith (el ex de los Giants) y Nnamdi Asomugha dieron mucho menos rendimiento del esperado. Asomugha jugó descolocado, en un rol que no es el que le ha llevado al status que tiene, la mayoría de la temporada. La secundaria de ensueño hizo aguas a menudo. Y hasta Michael Vick, una de las sensaciones de la pasada temporada, pareció un jugador peor esta.

La pésima gestión del reloj de Reid es conocida. Este año, tenemos otra nueva habilidad que añadir: la de no saber gestionar las ventajas en el 4.º cuarto. Hasta cinco partidos que iban ganando en el último periodo acabaron perdiendo: contra Falcons, 49ers, Giants, Bears y Cardinals. Manda huevos.

2.- Norv Turner

Enésimo fracaso de Norv Turner al frente de los San Diego Chargers. Eso sí, esta temporada han variado la forma de fracasar. Solían empezar de forma terrible para enderezar el rumbo después. Este año, empezaron bien (4-1) para cagarla lamentablemente después (4-7). La reacción final no fue suficiente, era demasiado tarde. Por segundo año consecutivo, pese a ser el equipo con más talento de una división muy barata, la AFC Oeste, los Chargers son incapaces de llegar a playoffs. Muy triste. Y Turner, confirmado en su cargo. Y Rivers y Gates a la Pro Bowl.

3.- Jim Caldwell

Se sospechaba que no pintaba nada, que el que mandaba ahí era Peyton Manning. Sin Manning tampoco es que abunde el talento, pero algo hay. Mathis, Freeney, Wayne, Garçon... Y no es de recibo que los Colts bajen los brazos del modo que vimos en algunos partidos. No entiendo cómo un entrenador cuyo equipo llega a ponerse 0-13 no es despedido. Y todavía no lo ha sido. Tremendo.

Mejor ejecutivo

1.- Mike Brown (Cincinnati Bengals)

Tras años y años de lamentable gestión, el propietario de los Cincinatti Bengals e hijo de Paul Brown puede presumir de una temporada de aciertos. Y eso que no podía presentarse peor. Con su quarterback titular declarando públicamente que prefería retirarse a seguir jugando en Cincinnati (olé tus huevos, Carson Palmer), con desbandada de estrellas (Jonathan Joseph y Chad Ochocinco, que aunque no lo parezca algún día lo fue) y con un entrenador ya muy quemado.

Los novatos no pudieron dar mejor resultado. Andy Dalton, elegido en segunda ronda después de muchos (Newton, Locker, Ponder y Gabbert), ha dado mejor rendimiento en su primera temporada que Palmer la pasada. A.J. Green, la primera elección de los Bengals, lleva camino de receptor estrella de la NFL. Y la joven defensa está entre las mejores de la liga.

Con todo, la mejor gestión estaba por llegar. A pesar de que Brown había manifestado que no pensaba traspasar a Palmer (lo que hace que las ofertas que lleguen sean más sustanciosas), atracó al primer desesperado que llamó a su puerta: los Oakland Raiders. Menudo atraco. Una primera ronda de 2012 más una segunda ronda condicional en 2013 que puede convertirse en primera si los Raiders llegan a la final de la AFC el año que viene (difícil, dicho sea de paso). Una auténtica burrada.

Los resultados deportivos, excelentes. Ganando a equipos mediocres (que hay que ganarlos, dicho sea de paso), los Bengals se plantan en playoffs. Y a partir de ahora, puede pasar de todo.

2.- Mickey Loomis (New Orleans Saints)

Los Saints tienen esta temporada mejor plantilla que hace un par de años, cuando ganaron el anillo. Reemplazaron a Reggie Bush, jugador caro, por Darren Sproles. Incorporan a Ingram para formar el backfield más profundo de la NFL junto al propio Sproles, Thomas e Ivory. Los Saints también consiguieron retener a su coordinador defensivo, Gregg Williams. El agujero en defensa que les costó la eliminación en Seattle tardó en corregirse, pero esa defensa ya no es un coladero. Y con un ataque así, basta poquito para ganar.

3.- Rick Smith (Houston Texans)

La contratación de Wade Philips ha sido un éxito. La plantilla contaba con la profundidad suficiente para reponerse a las constantes lesiones. Se han incorporado a jugadores importantes como Jonathan Joseph, y la elección de T.J. Yates ha dado buen resultado, dadas las circunstancias.

Peor ejecutivo

1.- Oakland Raiders

Ni Al Davis ni sus sucesores han estado inspirados en sus decisiones. Los Raiders, que están lejos de contar con la plantilla ideal, apostaron todo al presente, y en el presente están eliminados. ¿Cómo pueden mejorar? Sin apenas elecciones en el draft próximo y sin espacio salarial para fichar agentes libres, la situación parece complicada.

2.- Gene Smith (Jacksonville Jaguars)

Los Jaguars parecían darse por vencidos antes de empezar la temporada con el incomprensible despido de David Garrard. Cagada gorda. Sus receptores son lamentables, y el rendimiento del generosamente pagado Marcedes Lewis no ha sido bueno. Ahora llegan nuevos aires a la franquicia, que acaba de ser vendida a un millonario paquistaní, Shahid Khan.

3.- Thomas Dimitroff (Atlanta Falcons)

Los Falcons fueron el mejor equipo de la NFC la pasada temporada regular, pero su comportamiento durante la offseason era más propio de una franquicia en reconstrucción. Es verdad que su récord era un poco engañoso, puesto que en más de una victoria llegó tras dosis importantes de potra, pero tenían un estilo y las carencias más importantes eran las de su defensa. Sin embargo, en el draft pagaron un precio muy alto para seleccionar a un receptor, Julio Jones, que aunque tiene pinta de gran jugador, no parece solucionar los problemas de este equipo. Lejos de mejorar, los Falcons han empeorado, intentado cambiar su estilo de ataque para lograr mayor explosividad. En defensa, siguen siendo vulnerables, como mostraron hace un par de semanas los Saints. Si algo funciona, no hace falta revolucionarlo.

Regreso de la temporada (comeback player of the year)

1.- Steve Smith (Carolina Panthers)

Casi no nos acordábamos de él, pero Smith ha demostrado que si las lesiones lo respetan y su quarterback tiene el brazo y el atrevimiento suficientes, es una amenaza profunda de primera. Alguna de las jugadas más espectaculares de la temporada llevan la firma de Steve Smith.

2.- Matthew Stafford (Detroit Lions)

En su primera temporada sano, Stafford supera las 5000 yardas de pase. No estaba seguro de si debía incluirle en esta categoría, porque de vuelta está alguien que ya estuvo, y Stafford nunca estuvo a este nivel. No sé si se me entiende. Una temporada espectacular, en cualquier caso.

3.- Eli Manning (New York Giants)

Este sí que está de vuelta. Tras una temporada (sobre todo el final) lamentable, Eli Manning vuelve a ser el jugador fiable y decisivo en los últimos minutos de los partidos. Clave en el triunfo de los Giants en la NFC Este.

Mayor regresión de la temporada

1.- Josh Freeman

Su temporada es pésima. La falta de un juego de carrera de garantías (Blount no ha sido el de la temporada pasada, y ha sido baja en más de un partido) y el bajón de rendimiento de sus receptores han influido, pero lo más grave es su descuido del balón. Demasiadas pérdidas de balón.

2.- Chris Johnson

Ya hemos hablado de él. De CJ2K a CJ1K.

3.- Peyton Hillis

La maldición del Madden se cobra una nueva víctima. Entre lesiones y polémicas, Hillis ha jugado poco y sus compañeros le han acusado de no darlo todo por el equipo. Muy fea temporada.

Mejores partidos

1.- Green Bay Packers - New Orelans Saints (1.ª jornada)

Escribía después de verlo que dudaba mucho de que pudiésemos ver un partido tan espectacular como este en toda la temporada. Yo no lo vi. Sí, las defensas fallaron, pero ante unos ataques así poco se puede hacer. Y el partido lo gana el equipo cuya defensa fue más oportunista: la que forzó varias pérdidas de balón y protagonizó la goal line stand en la última jugada.


2.- San Francisco 49ers - New York Giants (10.ª jornada)

Un estilo de partido diferente. Más equilibrado. Defensas rocosas, pass rush de primera y sangre por cada yarda. Los touchdowns no llegaron hasta la segunda mitad, y gracias a la resistencia de su defensa en la red zone terminaron ganando los Niners. San Francisco confirmaba que iba en serio. Muy en serio.

3.- Detroit Lions - San Francisco 49ers (6.ª jornada)

Un partido que tuvo de todo. Jugadas brillantes, polémica arbitral, remontada y bronca final.

Peores partidos

1.- Denver Broncos - Kansas City Chiefs (17.ª jornada)

Se esperaba mucho de este partido. El campeonato de la AFC Oeste estaba en juego, y el morbo servido con la vuelta de Orton a Denver. Pero desde la lesión de Bowe el ataque de Kansas City apenas pudo hacer nada. El de los Broncos, un completo desastre. Apenas vimos espectáculo. También los árbitros estuvieron mal. Todos. Se tragaron un facemask clamoroso a Tim Tebow en la red zone. Para cerrar el círculo, el perdedor de este lamentable partido se proclamó campeón y, como premio, acogerá un partido de wild card en su estadio ante un equipo que logró cuatro victorias más.


2.- Cleveland Browns - Seattle Seahawks (7.ª jornada)

El duelo entre el equipo de Charlie Whitehurst y los Browns fue fiel a las expectativas.

3.- New Orleans Saints - Indianapolis Colts (7.ª jornada)

Un partido en prime time que no existió. No hubo partido. 62-7. Ni cuando los Saints renunciaron a atacar, recurriendo solamente a la carrera, fueron los Colts capaces de parar a New Orleans.

* * *

Aunque no constituye ningún premio en sí, terminamos con este resumen de las mayores rajadas de la temporada.


Mañana o pasado, la previa de la wild card round.

5 comentarios:

  1. "Mejor jugador (lo que en Estados Unidos se denomina MVP)"

    No estoy de acuerdo. No sé cuál será el criterio utilizado por la gente que vota el mvp, lo he buscado pero no lo encuentro, por lo que supongo que cada uno votará lo que le dé la gana. Pero siendo estrictos, mvp es simplemente "jugador más valioso", y no "mejor jugador", que para mí son conceptos diferentes. Coincido en que si fuera el mejor jugador, normalmente debería coincidir con el jugador ofensivo del año, pero no es así. Para mí, jugador más valiosos significa eso, jugador con más valor para su equipo. Por ponerlo de un modo pseudomatemático, yo lo definiría como:

    valoración mvp del jugador X = (rendimiento del equipo) - (rendimiento del equipo sin ese jugador)

    Lógicamente el jugador con más valoración debería ser el mvp. Está claro que sigue siendo un criterio subjetivo, pues es imposible saber el rendimiento que hubiera tenido un equipo sin un determinado jugador, pero bueno, creo que se entiende a lo que me refiero.

    Creo que el jugador ofensivo del año debe ser sin duda para Rodgers, pero el mvp no lo tengo tan claro. Lo que sí está claro es que si al final Rodgers no se lo lleva (el mvp) el gran culpable habrá sido Matt Flynn.

    Gran artículo, como siempre, un saludo!

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  2. Gracias por tu comentario, Alberto. Muy interesante. Yo tampoco conozco si existe algún criterio orientativo sobre qué es el "most valuable player" más allá de la propia literalidad del término, aunque estoy seguro de que el voto es libre, por lo que cada uno de los cincuenta periodistas dirán lo que les da la gana.

    Es verdad que lo de "mejor jugador" es poco literal y que "más valioso" sería más fiel al sentido original, porque el mejor jugador a lo mejor no es quien mejor ha jugado, y creo que es eso lo que se busca.

    No estoy de acuerdo con tu fórmula, porque creo que el resultado al que lleva es al del "jugador más imprescindible" o insustituible, y eso no es lo que se busca. Al final, el premio dependería de la calidad del suplente, lo que en la mayoría de los casos es imposible de saber (¿qué habrían hecho los Saints con Owen Daniels? nadie lo sabe) y creo que tiene poco sentido.

    Pongamos un ejemplo: en rendimiento de un equipo es 800 (digamos que es lo que aporta Rodgers), pero como tiene un suplente que aporta 700 (digamos que Flynn aporta eso), la valoración MVP es 100. En otro equipo, su rendimiento es muy inferior al primero, unos 300, pero sin ese jugador se habría quedado en 100. Resultado, 150. ¿Te parecería normal un jugador que "crea" 800 fuese peor valorado que otro que "crea" 300, menos de la mitad, solo porque su suplente es peor? Es lo que sucede con tu propuesta, en la que al final lo único que se mide es la "imprescindibilidad". De hecho, creo que aplicando esa fórmula Jay Cutler aspiraría a MVP.

    Yo sigo pensando que hay que premiar al que más ha aportado, con independencia de la capacidad del equipo para suplir su baja.

    Saludos.

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  3. Buenas tardes, he descubierto hoy este blog y me parece fantastico.
    Tenia una pregunta para el que sepa responder, y es que me dijeron la semana pasada que en el nuevo canal de TDT Energy estuvieron televisando un partido de la NFL....es cierto? podremos ver en abierto la NFL?
    Por cierto, entre el ranking de los peores entrenadores, deberias poner tambien a Raheem Morris, de mis Buccaneers....

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  4. Hombre, yo creo que si mvp=rendimiento con-rendimiento sin, el premio es para Peyton Manning porque, aún cuando no podamos comparar este año "con" y "sin" (salvo que se dé el caso de realidades paralelas o vivamos en el día de la marmota), sí sabemos qué ocurrió el año pasado "con" y éste "sin", que es lo más próximo a comparar; de jugar un partido de playoffs en casa a pillar a Luck.

    Y yo también pienso que el OPY será un premio de consolación a Bress. Sin más.

    Un saludo,
    Yiyo.

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  5. Ya salieron los Giants a garantizar victoria, el autor del blog debe estar regocijándose

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